Bélgica, país sin gobierno, escollo para la Selección
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Michel encara esa tarea después de que el rey Felipe de Bélgica se la encomendase tras un primer intento fallido llevado a cabo por el líder nacionalista flamenco, Bart De Wever. De Wever, cuyo partido (N-VA) fue el más votado en las elecciones legislativas del pasado 25 de mayo, se rindió tras fracasar en el objetivo de preparar una coalición de centroderecha.
Las anteriores elecciones legislativas, celebradas en 2010, condujeron al país a la mayor crisis política de su historia al tardar más un año y medio en formar Gobierno, una situación que incluso hizo entrar a Bélgica en el libro Guinness de los Records.
La prensa belga destaca hoy la tarea del entrenador del seleccionado Marc Wilmots, un ex jugador, para comandar un plantel que brilla por la integración entre jugadores flamencos y francófonos acompañados de inmigrantes de origen africano. Un ejemplo para la crisis de fragmentación de la política del país.
De hecho, Bélgica está lingüísticamente dividida. Tiene tres lenguas oficiales: el 60% de su población, principalmente en la región de Flandes, habla neerlandés, mientras que cerca del 35% habla francés (en la región de Valonia, al sur, y en la Región de Bruselas-Capital, una región oficialmente bilingüe que acoge también una minoría de hablantes de neerlandés). Menos de un 1% de los belgas vive en la Comunidad germanófona donde hablan alemán, al este del país. A menudo, esta diversidad lingüística lleva a conflictos políticos y culturales, y se refleja en el complejo sistema de gobierno de Bélgica y en su historia política.
Desde finales de la Edad Media hasta el siglo XVII, fue un floreciente centro de comercio y cultura. Desde el siglo XVIII hasta la Revolución belga de 1830, Bélgica, en aquella época llamada los Países Bajos del Sur, fue el lugar de muchas batallas entre los poderes europeos, y es por ello que se ha ganado el apodo de "el campo de batalla de Europa" o "la cabina de Europa".
Es uno de los miembros fundadores de la Unión Europea cuyas instituciones principales son hospedadas en el país, así como muchas otras organizaciones internacionales, como la OTAN.
El primer movimiento de población bien documentado fue la conquista de la región por la República Romana en el siglo I a. C., seguida en el siglo V por los francos germánicos. Éstos establecieron el Reino Merovingio, que pasó a ser el Imperio carolingio en el siglo VIII.
Durante la Edad Media, los Países Bajos estaban fragmentados en pequeños estados feudales. La mayor parte de ellos se unió durante los siglos XIV y XV con la casa de Borgoña, formando los Países Bajos borgoñones. Estos estados ganaron el estatuto de autonomía en el siglo XV y fueron conocidos desde entonces como las Diecisiete Provincias.
La historia de Bélgica se puede distinguir de la de los Países Bajos desde el siglo XVI. La Guerra de los Ochenta Años (1568-1648) provocó la división de las Diecisiete Provincias en las Provincias Unidas al norte y los Países Bajos del Sur al sur. Las provincias del sur fueron gobernadas sucesivamente por los Habsburgo españoles y austriacos.
Hasta la independencia de Bélgica, los Países Bajos del Sur eran un territorio muy codiciado por los conquistadores, y fueron el telón de fondo de la mayor parte de las guerras franco-españolas y franco-austriacas durante los siglos XVII y XVIII. La reunificación de los Países Bajos como Reino Unido de los Países Bajos tuvo lugar a finales del Imperio Francés, en 1815.
Tres lustros después, el triunfo de la Revolución belga de 1830 para independizarse de Holanda se decidió en la capital, en las llamadas Cuatro Jornadas de Bruselas, bajo un Gobierno Provisional cuyo miembro más influyente era Charles Rogier, y con la dirección militar, como comandante en jefe, del exiliado español Juan Van Halen. Desde la instauración de Leopoldo I como rey en 1831, Bélgica ha sido una monarquía constitucional y una democracia parlamentaria.
El fútbol
El seleccionado de Bélgica jugó su primer partido oficial el 1 de mayo de 1904, fue un 3-3 contra Francia. Antes de ese compromiso, una selección belga plasmó varios encuentros pero el equipo incluía a algunos jugadores ingleses, por lo que no se toman en cuenta.
En 1920, el equipo obtuvo su mayor logro cuando alcanzó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Amberes. En la final contra Checoslovaquia, cuando el marcador estaba 2-0 a favor de Bélgica, los jugadores checoslovacos se retiraron de la cancha por varias razones: "las decisiones del arbitro inglés", "los gestos provocativos" y "la entrada al campo de juego del ejército belga".
Bélgica participó en once Copas Mundiales, alcanzando su mejor resultado con el cuarto puesto obtenido en México 1986, cuando fue derrotado por Argentina. El combinado belga ha obtenido buenos resultados también en la Eurocopa, al lograr el tercer lugar en 1972 y llegar a la final en 1980.
En el Mundial de Brasil 2014, el DT Marc Wilmots es destacado como el factor decisivo de la selección de Bélgica que tras su clasificación a cuartos de final se transformó en el motivo de unión de todo un país, que debe definir su nuevo gobierno. "Antes había tres meses: una para el entrenador y sus asistentes, otra para los francófonos y otra para los flamencos", relata el propio Wilmots, irónico con las divisiones del país y autor de una "mini" revolución en los "Diablos Rojos", como llaman al equipo. "Hoy sólo hay una gran mesa en la que todos se mezclan", resaltó el entrenador de 45 años y ex integrante de la selección que en Brasil 2014 cortó una ausencia de doce años en Mundiales.
Justamente, la última participación de Bélgica en una Copa del Mundo se remontaba a la edición disputada en Corea-Japón 2002, en la que fue eliminada en octavos de final al caer 2-0 contra Brasil, que luego se consagraría campeón. Luego, los "Diablos Rojos" cayeron en un abismo del que sólo resurgieron en las eliminatorias europeas para Brasil 2014, en la que ganaron invictos el Grupo A.
Ante Argentina, será un duelo especial para Bélgica, pues buscará tomarse revancha de Argentina, su verdugo en semifinales de México 86. Pero el desafío ante Argentina servirá además como una nuevaprueba de unión para una Bélgica que llegó a cuatros de final tras vencer por 2-1 a Estados Unidos en tiempo suplementario del último duelo de octavos de final de Brasil 2014.
El desempeño de los "Diablos Rojos" incluso capturó laadmiración del rey Felipe, que en estos días lleva adelante un proceso de consultas para formar un gobierno tras aceptar en mayo pasado la renuncia al premier Elio Di Rupo. El propio Felipe destacó la tarea de la selección como símbolo para unir a un país dividido entre flamencos republicanos y separatistas, por un lado, y los francófonos de Bruselas por otro. O sea, los ricos del norte y los menos afortunados del sur.
En 1920, el equipo obtuvo su mayor logro cuando alcanzó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Amberes. En la final contra Checoslovaquia, cuando el marcador estaba 2-0 a favor de Bélgica, los jugadores checoslovacos se retiraron de la cancha por varias razones: "las decisiones del arbitro inglés", "los gestos provocativos" y "la entrada al campo de juego del ejército belga".
Bélgica participó en once Copas Mundiales, alcanzando su mejor resultado con el cuarto puesto obtenido en México 1986, cuando fue derrotado por Argentina. El combinado belga ha obtenido buenos resultados también en la Eurocopa, al lograr el tercer lugar en 1972 y llegar a la final en 1980.
En el Mundial de Brasil 2014, el DT Marc Wilmots es destacado como el factor decisivo de la selección de Bélgica que tras su clasificación a cuartos de final se transformó en el motivo de unión de todo un país, que debe definir su nuevo gobierno. "Antes había tres meses: una para el entrenador y sus asistentes, otra para los francófonos y otra para los flamencos", relata el propio Wilmots, irónico con las divisiones del país y autor de una "mini" revolución en los "Diablos Rojos", como llaman al equipo. "Hoy sólo hay una gran mesa en la que todos se mezclan", resaltó el entrenador de 45 años y ex integrante de la selección que en Brasil 2014 cortó una ausencia de doce años en Mundiales.
Justamente, la última participación de Bélgica en una Copa del Mundo se remontaba a la edición disputada en Corea-Japón 2002, en la que fue eliminada en octavos de final al caer 2-0 contra Brasil, que luego se consagraría campeón. Luego, los "Diablos Rojos" cayeron en un abismo del que sólo resurgieron en las eliminatorias europeas para Brasil 2014, en la que ganaron invictos el Grupo A.
Ante Argentina, será un duelo especial para Bélgica, pues buscará tomarse revancha de Argentina, su verdugo en semifinales de México 86. Pero el desafío ante Argentina servirá además como una nuevaprueba de unión para una Bélgica que llegó a cuatros de final tras vencer por 2-1 a Estados Unidos en tiempo suplementario del último duelo de octavos de final de Brasil 2014.
El desempeño de los "Diablos Rojos" incluso capturó laadmiración del rey Felipe, que en estos días lleva adelante un proceso de consultas para formar un gobierno tras aceptar en mayo pasado la renuncia al premier Elio Di Rupo. El propio Felipe destacó la tarea de la selección como símbolo para unir a un país dividido entre flamencos republicanos y separatistas, por un lado, y los francófonos de Bruselas por otro. O sea, los ricos del norte y los menos afortunados del sur.
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